La trastienda de los servicios de inteligencia -reseña

 

¿De qué va el libro?

    La trastienda de los servicios de inteligencia es un recuento de hechos reales, algunos de ellos ficcionados, en los que Fernando San Agustín ha participado como Agente de Inteligencia.

    El autor cuenta en primera persona las operaciones que ha realizado desde mediados de los años 60, cuando terminó el servicio militar y fue reclutado para ser un agente de inteligencia. El protagonista es el mismo autor con diferentes nombres, según cada operación. Cuenta cómo ha participado en diferentes operaciones antiterroristas en la lucha contra ETA, cómo intentó convencer a miembros de ETA sin delitos de sangre para alejarles de la lucha armada, crearles una nueva identidad y enviarlos lejos de España.

    Cómo se infiltró para conseguir información de alto nivel y evitar atentados. También cómo participó en una operación en el Vaticano para limpiar la corrupción de algunos cardenales y obispos.

¿Qué me ha parecido?

    Fernando San Agustín nos lanza en una vorágine de suciedad y mentiras encubiertas en este apasionante libro que te dejará con la boca abierta. 

    ¿Hasta qué punto estamos cubiertos de cieno? ¿Está bien mentir por el bien común? ¿Cuándo es suficiente? ¿Pasa factura vivir una vida de mentira? ¿Cómo se gestiona estar siempre en el alambre? ¿Se puede? ¿Qué tipo de carácter debes desarrollar para que los hechos no te arrastren y te hagan quedar a la deriva?

    'La trastienda de los servicios de inteligencia' hace honor al título, porque aquí todo está cubierto de polvo y telarañas que no quieres que te toquen.  Las ves de lejos, tienes que pasar junto a ellas por un hueco por el que no cabes  y sabes que van a abrazarte hagas lo que hagas. Es inevitable. Es como un vino añejo que, cuando lo abres, descubres que se ha perdido.

    Qué mal cuerpo deja este libro de San Agustín. Todo en esta historia de mentiras tiene un barniz azucarado que deja un pringue lechoso en la mente que no te puedes quitar sin herirte a ti mismo/a. No quiero ni pensar lo que tiene que ser vivir así, siempre alerta, siempre con la siguiente mentira en los labios, lista para ser dicha con la confianza de quien sabe que ya le sale sola, natural, porque es un arte y ya lo has refinado hasta el límite. 

    Como digo, el libro deja mal cuerpo porque cuenta un montón de hechos reales desde primera línea. Asquea ver a qué se llega, y resulta aún más doloroso ver hasta qué punto la corrupción se extiende por todas partes, incluida esa iglesia que poco o nada tiene que ver con lo que representa. Porque al final, todo es un juego de poder. Un juego de tronos, que diría R. R. Martin. Una suerte de ajedrez donde los peones son seres humanos y nadie gana. Porque todo lo que haces, quieras o no, tiene un precio y tarde o temprano llega la factura. 

    El libro de San Agustín se lee del tirón como si fuera un thriller, de hecho, tiene mucha más acción que otros que haya podido leer de escritores superventas. Pero sobre todo, lo que emana es verdad. Y en esa verdad radica la peste, porque no hay nada que hieda más que la maldad humana. Somos nuestros propios depredadores. 

    Se habla de terrorismo, de extremismo, de religión, del ejército y el resto de cuerpos policiales, de la corrupción en todas las cotas de poder, desde 'los concejalitos' de turno que no tienen ni la EGB y sólo quieren salir en las portadas de los periódicos locales, a los más altos niveles del estamento político. Se habla de muchas cosas, pero al final todo gira en torno a lo mismo: el poder y el dinero. 

    El libro no necesita propaganda, el boca-oreja lo hará por él. La portada está muy chula, la edición de Roca, sobresaliente, como siempre, y el contenido, superlativo.

    Reconozco que en muchos momentos me he sentido molesto y ofendido por las actitudes y acciones de unos/as y otros/as. Supongo que en una historia de esta envergadura es inevitable. Al final te sale el pensamiento solo, ese '¿por quién estamos gobernados, Dios mío?'. No lo puedes evitar. Es lo que hay. 

    Un libro fantástico, no apto para corazones frágiles.

Con la colaboración de Roca Editorial.