Sentido y sensibilidad -reseña

 ¿De qué va el libro?

Tras la muerte repentina del padre, la familia Dashwood queda desamparada. La novela sigue los avatares de esta familia, orientando la atención especialmente hacia las peripecias de sus dos hermanas mayores, que encarnan posturas vitales diametralmente opuestas: Si Elinor representa el sentido común y la razón, Marianne actúa impulsada por el sentimiento y la emoción. Los escollos que estas dos muchachas casaderas han de salvar en sus desventuras amorosas les enseñan que quizás un virtuoso equilibrio entre ambas actitudes es la única forma de salvarse. Sentido y Sensibilidad, la primera novela que Austen publicó, esboza un retrato fidedigno de la situación de la mujer a finales del siglo XVIII.

¿Qué me ha parecido?

 

Austen convierte lo cotidiano en extraordinario, explorando el corazón humano con una claridad que trasciende generaciones

    En el vasto mundo de la literatura, pocas autoras han conseguido capturar con tanta precisión y sutileza las emociones humanas y las complejidades de las relaciones sociales como Jane Austen. Con Sentido y sensibilidad, la autora nos entrega una narrativa pulida y profundamente humana, que no solo examina las tensiones entre el deber y el deseo, sino que las entrelaza en una historia memorable. En esta reciente edición de Austral, como parte de su refinada Colección Singular, Austen renace con una presentación impecable y un diseño digno de sus mejores palabras. Esta edición, con su sólida encuadernación y su estética que recuerda los clásicos más venerados, nos invita a explorar nuevamente una novela que sigue cautivando corazones y mentes, incluso dos siglos después de su publicación.

    Austral ha conseguido dar forma física a la esencia de Austen. Esta Colección Singular, con su cuidadosa elección de papel y tipografía, transforma el libro en una experiencia visual y táctil que enriquece cada momento de lectura. La edición en tapas duras, el tamaño generoso de la letra y los márgenes bien equilibrados ofrecen una comodidad que resulta crucial en una obra donde cada frase merece saborearse. Al abrir el libro, uno siente de inmediato la importancia del objeto en sus manos, como si se tratara de una reliquia literaria. Sentido y sensibilidad ya no es solo una novela; es un universo al que ingresamos con reverencia y anticipación, inmersos en una edición diseñada para rendirle homenaje.

    La trama de Sentido y sensibilidad pivota en torno a las vidas de las hermanas Dashwood, Elinor y Marianne, quienes encarnan, en muchos sentidos, dos fuerzas opuestas de la naturaleza humana. Por un lado, Elinor representa la razón y la autocontención; una mujer sensata y moderada que se convierte en el pilar de su familia tras la muerte de su padre. Ella encuentra en Edward Ferrars un amor sereno y constante, pero al mismo tiempo sufre en silencio por él, atrapada entre el decoro y el amor verdadero. Marianne, por otro lado, simboliza la pasión desbordante y la entrega emocional sin barreras. Su relación con John Willoughby es la imagen misma de la pasión que, sin embargo, termina en dolor y desencanto. Austen, con su prosa afilada y observadora, muestra cómo ambos extremos pueden llevar a una vulnerabilidad profunda, revelando la necesidad de equilibrio entre el sentido y la sensibilidad.

    “La verdadera fortaleza radica en la habilidad de equilibrar lo que sentimos con lo que sabemos,” parece decirnos Austen a través de sus personajes. Mientras Elinor lucha por no exponer su sufrimiento y proteger a su familia, Marianne cae en una espiral de emociones que la dejan vulnerable ante las desilusiones del mundo. En una época en la que las mujeres tenían que conformarse a normas estrictas y dependían del matrimonio para asegurar su posición social, la obra es una crítica velada a las limitaciones impuestas a las mujeres. Austen utiliza a ambas hermanas para explorar cómo el sentido y la sensibilidad interactúan y chocan en la vida real, y cómo, en última instancia, cada una de ellas debe aprender de la otra para hallar la plenitud.

    Uno de los grandes méritos de Austen en Sentido y sensibilidad es su capacidad para desarrollar una estructura narrativa que, a primera vista, parece sencilla, pero que, en realidad, esconde una intrincada red de simbolismos y comentarios sociales. La autora disecciona con astucia las relaciones de poder, los matrimonios por conveniencia y las luchas internas que las personas enfrentan entre lo que desean y lo que deben hacer. Sus personajes no son arquetipos planos; son seres humanos tridimensionales que se mueven en un mundo que les impone normas a cada paso. A través de Elinor y Marianne, Austen consigue criticar la superficialidad de la sociedad, subrayando la importancia de la honestidad emocional y la reflexión. La autora, en su sutileza, invita al lector a observar la hipocresía y las falsas apariencias que rodean a las jóvenes Dashwood, destacando así la vigencia de sus ideas.

    La historia, sin embargo, no se limita a los conflictos internos de sus protagonistas. Austen introduce una serie de personajes secundarios que enriquecen el mundo de Sentido y sensibilidad, cada uno aportando una perspectiva adicional sobre las relaciones humanas. Desde el pragmático y reservado Edward Ferrars, que en su conflicto interno refleja la presión de las expectativas familiares, hasta el Coronel Brandon, un hombre maduro y noble que, aunque silencioso y discreto, es el epítome de la lealtad y la constancia, cada figura en la novela es un espejo en el que Austen refleja los dilemas morales de su tiempo. Estos personajes secundarios aportan un matiz de complejidad y, a través de sus interacciones con las protagonistas, permiten que la novela gane en profundidad y resonancia emocional.

    Austral ha logrado plasmar todo este mundo en una edición que se siente tanto atemporal como renovada. Con una sobria paleta de colores y un diseño que destila elegancia, la Colección Singular aporta un valor añadido a la novela. La edición invita al lector no solo a leer, sino a coleccionar, a redescubrir el placer de tener un libro que, tanto en forma como en fondo, es una obra de arte. La textura del papel, el detalle en los acabados y la calidad de las ilustraciones crean una experiencia de lectura envolvente que invita a una apreciación pausada de cada página.

    En tiempos en que la gratificación instantánea domina la vida cotidiana, Sentido y sensibilidad nos recuerda el poder de la lectura reflexiva, donde cada capítulo y cada línea se convierte en un deleite que exige atención y nos devuelve un entendimiento más profundo de nuestras propias contradicciones. Para aquellos que buscan algo más que una simple historia de amor, Austen ofrece una meditación sutil y aguda sobre la naturaleza humana, y Austral ha brindado una edición que nos permite disfrutarlo en toda su grandeza.

    Con Sentido y sensibilidad, Jane Austen demuestra que el verdadero arte no se limita a su época. Su novela sigue siendo tan relevante hoy como lo fue en el siglo XIX, y Austral ha hecho un trabajo excepcional en presentar esta obra en un formato que respeta su legado. Esta edición es, en resumen, una invitación a detenernos, reflexionar y sumergirnos en un clásico que, como todos los grandes libros, sigue creciendo y cambiando con cada nueva lectura.

    En conclusión, esta edición de Austral de Sentido y sensibilidad es una pieza digna de coleccionistas y amantes de la literatura. Para el lector moderno, representa una oportunidad de redescubrir a Austen en todo su esplendor, envuelta en una edición que respeta y ensalza cada aspecto de su creación.